Brocheta de gambones a la plancha

Estamos a escasos días de la Navidad y aún nos estamos comiendo el coco sobre el menú que pondremos a la familia, que no cunda el pánico. Lo primero que tendremos que conocer serán los gustos de nuestra familia, o si no preguntárselos, seguro que así acertaréis.

Como no a todo el mundo le gusta la carne, hoy os propongo preparar estas deliciosas brochetas de gambones como primer plato, o si sois de comer, como entrante, ¡vamos para ir abriendo boca!. Con un par de brochetas y un poco de ensalada por comensal, quedaréis de lujo.

Para comprar estos gambones me fui a mi tienda de congelados de confianza, allí el sr. Enrich me asesoró sobre el tamaño que debía comprar y me recomendó este gambón austral de Conarpesa. En el mundo de la gamba o gambón pelado es fácil equivocarse con el tamaño, ya que al congelarlo añaden capas y capas de hielo haciéndonos creer que la gamba en cuestión tiene el tamaño que nosotros queremos y cuando se descongela nos llevamos una desilusión. Por eso acudí al sr. Enrich y no se equivocó, al descongelarse siguieron siendo igual de hermosos que cuando estaban en la bolsa congelados.

Para elaborar esta receta dejé las guindillas en el aceite desde el día anterior, para que fuera tomando sabor. Luego ese aceite lo puse a baja temperatura con las guindillas dentro durante unos 10 minutos. Ahí terminó de sacar el picante todo su sabor. Si no os gusta que pique pues no se lo añadís y santas pascuas.

Lo bueno que tiene esta receta es el corto tiempo de elaboración y lo poco que se mancha elaborándolas. Y por supuesto lo buenííísimos que están estos gambones, se me hace la boca agua al recordarlo...

Elaboración:

Macerar las guindillas en el aceite 24 horas. Cocinar las guindillas a baja temperatura unos 10 minutos antes de usar ese aceite para hacer las brochetas. Dejar enfriar.

Triturar el perejil (tres o cuatro ramas) con los dientes de ajo pelados y el aceite de guindilla. Insertar los gambones en palos de brocheta, yo puse cuatro por brocheta, y echarles por encima el triturado. Tenerlos macerando media hora.

Transcurrido este tiempo, encender una plancha y ponerla bien caliente. La mía tiene 5 puntos y yo la puse en el 4. Disponer las brochetas de gambones en la plancha y echar una cucharada de aceite (el que tenemos aliñado) sobre ellas y salarlas.

Cuando estén doradas darles la vuelta, aproximadamente 2 minutos por cada lado. Acompañar los gambones con lechuga en juliana y tomates cherry. Como maridaje he escogido una bebida aromatizada con burbujas, Frissé de frambuesa y pomelo bien frío, de Félix Solís Avantis.

¡A disfrutar!