Pastel de merluza y surimi

¿Cómo?, ¿que te ha tocado este año celebrar la Navidad en tu casa?, madre mía, seguro que ya andas buscando recetas por la red como una loca/o. Pues en esta entrada te enseño cómo preparar un riquísimo pastel de merluza con palitos de surimi paso a paso. Una receta económica, fácil y lo más importante, que te permitirá tener tiempo para estar con la familia y no toda la noche metida en la cocina.

Como acompañamiento le va genial la lechuga cortada en juliana y las salsas rosa o cóctel, de Calvé o mayonesa (yo he usado Kraft). Como a mí me gustan las dos, las he puesto juntas y además te permitirá jugar con los colores a la hora de decorar tu pastel de pescado, al igual que he hecho yo. También puedes decorarlo con la mayonesa y luego hacer dibujos con el tomate frito encima. Y como se puede hacer la víspera, te dará tiempo a cortar algunas formas como estrellas o flores sobre láminas de zanahoria antes de llevarlo a la mesa.

Puedes cubrir por completo el pastel con la salsa o como en las fotos, dejar parte sin nada para que se vea su bonito color. Si lo hacéis la víspera tendréis que guardarlo en la nevera cubierto con papel film transparente y decorarlo a última hora antes de servirlo. Lo que os sobre, si sobra algo, lo podéis consumir en los dos o tres días después de su preparación sin problema. En casa somos cuatro y sobró bastante, por lo que me he ido comiendo el pastel, mañana, tarde y noche, creo que se me está empezando a poner cara de merluza, ja ja ja.

Espero que os salga bien y me contéis cuándo lo preparásteis, alguna foto y si gustó o no, nosotros repetiremos, pero cuando seamos más ;-) en casa.

Elaboración:

Hervir la merluza cinco minutos en agua con un pellizco de sal y una rama de perejil. Escurrir y esperar a que se temple. Mientras tanto, cascar los huevos, batirlos y añadirles la pimienta molida y la cucharada de paté de salmón Tarradellas (este paté es opcional, pero le dará un toque de sabor diferente).

Incorporar el tomate frito Orlando y la nata (yo uso C.L. Asturiana 35% m.g.), ésta se puede sustituir por leche evaporada, para quitarle calorías al pastel.

Cortar los palitos de surimi con el cuchillo e incorporárselos a la preparación, a continuación desmenuzar con las manos la merluza, estrujarla con las manos, para eliminar el máximo posible de agua y añadirla. Al desmenuzarla con las manos notaremos si hay alguna espina o no. Que ninguno queremos ver a nuestro suegro o cuñado quejarse por que su trozo tiene espinas....

La textura del pastel dependerá de vuestro gusto, yo he querido que se notaran los trocitos de surimi por lo que lo he batido con la batidora poco. Si lo trituráis más tiempo os quedará una textura más fina.

Ahora enmantequillaremos un molde rectangular y lo rociaremos con pan rallado, para evitar en la medida de lo posible que se nos rompa nuestro pastel al desmoldarlo. Pondremos agua hirviendo en un recipiente más grande que nuestro molde y que lo cubra hasta la mitad. Lo llevaremos al horno precalentado a 180º C durante unos 60 minutos o hasta que al pincharlo por el centro con un palillo éste salga limpio.

Como veis el pastel cuando sale del horno es muy bonito pero al desmoldarlo aproximadamente a la hora después de que sale del horno es más bonito aún, con un precioso color salmón. Para ello colocaremos el plato donde lo vayamos a servir encima del molde y con un rápido giro de 180º le daremos la vuelta para que caiga al plato.

Cortar la zanahoria con cortadores de galleta o de fondant que tengáis por casa y para que os queden las salsas como en las fotos solo tendréis que meterlas en mangas pasteleras con un boquilla de estrella abierta. La que yo he utilizado es el número 32 de Wilton. Lo último que nos faltará será lavar las hojas de lechuga y cortarlas en juliana.

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