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Plato para 4 personas/Preparación: 45 min

Ingredientes:

4 patatas Monalisa medianas

75 gr. de setas portobello y shiitake

4 cdas. de nata

50 gr. de cebolla

150 gr. de queso Gorgonzola

30 gr. de nueces troceadas

Patatas asadas rellenas de queso gorgonzola, setas y nueces

Si hay una cosa sencilla que gusta muchísimo en casa son las patatas asadas. Incluso cuando no les pongo ningún acompañamiento. Sólo con sal y pimienta y vuelan de los platos.

Pero a mí me gustan con un poco más de gracia, es decir, con alguna salsa o acompañamiento para que no estén tan secas. Este es un plato muy sencillo pero con el que sacaréis una sonrisa a vuestra familia. Fácil de comer y con un sabor espectacular, os lo aseguro. Y por si esto fuera poco es sencillísimo de preparar, el horno lo hace casi todo.

Y si no tenéis horno, en el microondas se hacen una patatas asadas espectaculares también.

Es una idea perfecta para preparar cuando tenéis invitados en casa, fácil, económico y riquísimo. Un plato perfecto para días festivos en los que no miramos (mucho) las calorías y queremos tener tiempo para hablar con nuestros invitados.

¿Nos metemos en faena? Vamos allá con la receta.

Elaboración:

Lavar las patatas, pincharlas con la punta de cuchillo repetidas veces por su superficie.

Precalentar el horno a 180º C y meter las patatas durante unos 30 minutos, esto dependerá del tamaño de vuestras patatas. Si son medianas este es el tiempo idóneo para que se hagan.

Mientras, en una sartén con un poco de aceite pochar las setas troceadas (pequeñas, en brunoise) y cuando estén, apartarlas en un cuenco. Hacer los mismo con la cebolla. Unir la cebolla, las setas, unos 60 gr. de queso Gorgonzola y la nata en la sartén.

Sacar las patatas del horno y cuando no os queméis partirlas por la mitad con un cuchillo.

Vaciar con ayuda de una cucharilla la mayor parte de su contenido, no todo, ya que nos interesa que se queden con la forma.

Mezclar la patata que hemos sacado con la farsa que teníamos preparada en la sartén. Si fuera necesario añadir un poco más nata para que las patatas no queden secas. Trocear las nueces y mezclarlas con la patata. Por último pondremos por encima trocitos de queso gorgonzola y lo llevaremos de nuevo al horno, pero esta vez con el gratinador puesto. Las gratinaremos durante unos minutos hasta que el queso se haya fundido y dorado.

Las serviremos calientes a los comensales.