Solomillo de cerdo con castañas y membrillo

Se acercan las fiestas navideñas, cada vez la publicidad y las luces que cuelgan (desde noviembre) en nuestras calles nos recuerdan que pronto estaremos comiendo turrón, polvorones y tomando digestivos después de la cena de empresa. Nos pasamos, y yo la primera, pero luego vendrá enero y ya haremos propósito de enmienda.

Ahora, es decir, unas semanas antes de Navidad, es el momento idóneo para comprar la carne o el pescado que sirvamos en esas fechas. El precio aún no ha subido y es asequible a la mayoría de los bolsillos. Yo ya tengo mi solomillo en el congelador y algún lomo de salmón que marinaré para devorar en fin de año.

Cada año que pasa, me reafirmo en mi pensamiento de que tanta comida no es necesaria, que con menos, lo paso igual o mejor en estas fiestas. Así que, os iré presentando platos para preparar en Navidad sin tener que echar mano del Alka-seltzer.

Utilizando los productos del otoño he preparado este solomillo con castañas, miel y membrillo. Es un plato perfecto para dejar preparado la víspera y así poder disfrutar con familia y amigos.

Podéis sustituir el membrillo por un puré de boniato o calabaza, si para esas fechas no lo encontráis en el mercado.

Elaboración:

Salpimentar el solomillo y dorarlo en una sartén con cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen extra, a fuego medio, unos 20 minutos.

Pochar la mitad de la cebolla con el ajo en cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Añadir el membrillo en tacos pequeños, las castañas peladas y las ciruelas, cuando la cebolla esté dorada y blanda. Para facilitar el pelado de las castañas, meter en el microondas un minuto tapadas con film transparente y esperar unos minutos antes de pelarlas.

Sofreir todo y cuando empiece a dorarse añadir 6 cucharadas de azúcar moreno. Remover y cuando se haya disuelto el azúcar incorporar el vino blanco. Introducir el solomillo y dejar a fuego medio tapado, hasta reducir la salsa. Reservar.

Ahora glasearemos la media cebolla que nos quedaba. La cortamos en rodajas finas y le añadimos la mantequilla. Cuando empiece a dorarse añadir dos cucharadas de azúcar moreno y dejar que se haga el caramelo, retirar del fuego. Incorporar la cucharada de miel.

Presentar el plato con el solomillo cortado en rodajas gruesas junto con la guarnición. Salsear y servir bien caliente.